Una oferta completa de acogida y servicios para personas de edad muy avanzada, tanto autónomas como dependientes

RESIDENCIAS MEDICALIZADAS - GERIÁTRICOS

Las residencias de ancianos medicalizadas acogen, para estancias temporales o permanentes, a las personas de edad más avanzada que ya no tienen la capacidad física o psíquica de vivir en sus casas en seguridad o que desean romper con un aislamiento debilitante. Las residencias acogen a personas mayores en todas las etapas de dependencia. Numerosos centros están dotados de unidades especializadas para personas con Alzheimer o trastornos relacionados.


RESIDENCIAS ASISTIDAS PARA LA TERCERA EDAD

Las residencias asistidas para personas mayores son establecimientos de alta gama, no medicalizados, situados en centros urbanos. Ofrecen apartamentos en alquiler - desde estudios hasta pisos de tres habitaciones, amueblados o no, con cocina equipada y armarios - así como un conjunto de servicios: conserjería, espacios Club (salón, bar, salas de juegos, etc.), servicios personales, etc.

Las residencias acogen a personas mayores autónomas, que buscan un entorno seguro, servicios adaptados a sus necesidades y una vida social entretenida, para estancias permanentes o cortas. Los equipos de estas residencias, compuestos por personal hotelero y administrativo, organizan la acogida y el alojamiento en torno a un proyecto de vida personalizado.


SERVICIOS A DOMICILIO Y SERVICIOS DE ENFERMERÍA A DOMICILIO

  • Los servicios a domicilio aportan asistencia durante los siete días de la semana y las 24 horas del día en la realización de las tareas y actividades de la vida cotidiana, lo que permite preservar la autonomía y favorecer el vínculo social: pre-hospitalización, altas hospitalarias, preparación para el ingreso en una residencia de ancianos, mantenimiento a domicilio.

  • Los servicios de enfermería a domicilio están dirigidos a personas mayores de más de 60 años por prescripción médica. Objetivos: prevenir o diferir algunas hospitalizaciones; reducir el tiempo de hospitalización y permitir un retorno más rápido al domicilio; retrasar la entrada en una residencia, acompañar a personas que se enfrentan a situaciones dolorosas.